El otro día, aprovechando que me habían prestado una bicicleta de esas urbanas pleglables de ruedas de 20 pulgadas, me decidí a recorrerme con ella el centro de Bilbao, ya que tenía que realizar una serie de recados que tenía pendientes y así, de paso, probaba eso de la movilidad sostenible por ciudad en bicicleta. La impresión final, desde la perspectiva de uno que solo cicla por el centro de la ciudad en fines de semana y para cruzarla buscando salidas hacía bidegorris o carreteras fue un tanto diferente de lo que esperaba.
El primer lugar hay que reconocerlo, es un medio de transporte rápido, estuve tomando tiempos de las distancias e incluso «comparandome» con un autobus de linea, y pudo decir que es más rápido que el coche y el bilbobus, no así en el caso del metro o de una motocicleta que se come los atascos.
Si que es un poco tedioso el para-arranca de los semáforos, se echa de menos zonas menos semaforizadas.
La zona de Abandoibarra es la más rápida y segura de todo Bilbao, es una pena que no tenga continuidad en los mismos términos (bidegorri con ausencia casi total de semáforos.
El Centro (Gran Vía y alrededores) es muy peligrosa y requiere atención constante, en veinte minutos me abrieron una puerta, se me echó encima un Bilbobus (posiblemente el chofer controlaba, pero eso tu no lo sabes), casi me lleva por delante uno que cambiaba de carril en Moyua y un taxista me ha adelantado dejando menos de un metro (a pesar de tener otro carril).
De la bicicletilla que voy a decir, van muy bien y con sus 7 marchas te puedes defender más o menos por todo Bilbao, aunque si debo reconocer que he echado en falta alguna marcha más corta, para las pocas cuestas que subí, y sobre todo más velocidad.
Y tu ¿que opinión tienes de pedalear por el centro de tu ciudad?.
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