Sintomas de un pedalier averiado.

Los problemas de pedalier son averías comunes de las bicicletas, ya que son elementos dotados de un  rodamiento a cada lado que, al contacto con el agua van perdiendo su lubricación hasta el punto de que empiezan a fallar, originando ruidos y hasta un posible agarrotamiento.

Como es inevitable que la bicicleta se moje, no solo en días de lluvia, tambien en los necesarios lavados, y que el pedalier por su exposición reciba agua, el método más efectivo para que funcione correctamente es hacerle un mantenimiento periódico desmontando limpiando y engrasando (sobre todo los rodamientos si son sin sellar).

Pero ¿como notamos que un pedalier necesita mantenimiento o sustitución completa o parcial?. Normalmente el mantenimiento conviene hacerlo de manera periódica, una vez al año podría ser suficiente dependiendo de los kilómetros, pero hay algunos síntomas que nos pueden indicar que algo no va bien y, prestandoles un poco de atención podemos aumentarles su duración o por lo menos evitarnos averias mayores.

Los principales síntomas de un pedalier averiado, o que empieza a averiarse son:

  • Gripado: Deja de girar el eje de los pedales, se ha quedado agarrotado, en este caso, debido a la rosca contraria a la dirección de pedaleo, puede llegar a aflojarse el pedalier y desenroscarse.
  • Crujidos y ruidos: Al pedalear oiremos sonidos metálicos continuos en forma de crujidos y golpecitos, estos ruidos pueden ir acompañados de una leve dureza en el pedaleo.
  • Holguras: Cuando al pedalear notamos holguras o puntos muertos.
  • Ruido «en vacio»: Este síntoma viene bien conocerlo sobre todo a la hora de hacer un mantenimiento preventivo, consiste en dar pedales a mano sobre un banco, o si no lo tenemos pedalear a la contra, y escuchar el ruido que hace el pedalier, se llega a notar cuando el pedaleo no es fluido y se escucha el ruido de las bolas del rodamiento que suenan demasiado.
  • Pedalada a la contra al aire: Esta prueba también es muy sencilla y al alcance de cualquiera consiste en dar un golpe de pedar, a mano, en dirección contraria, si vemos que no gira o gira muy poco es porque el eje no está en condiciones.

Observando estos síntomas podemos detectar cualquier error en el eje del pedalier, evitando que una avería de esta pieza nos genere otra mayor o que nos deje tirados en medio de nuestra ruta.

Ver modelos de ejes de pedalier.